AMIGOS DEL ALMA

sábado, 17 de octubre de 2009

CERCA DE TI


Hoy te doy gracias, Señor, porque me siento hermana de mis hermanos. Siento la alegría de un inmenso mar de almas que me miran, que están a la espera de lo que yo haga, de lo que yo diga, de lo que yo ame... No los veo con mis ojos, pero sé que están ahí. Tú nos pusiste unos al lado de otros para que cada uno repartiera sus propios dones entre todos, para que ninguno atesoráramos bienes propios, todo es de todos y aunque algunos en esta tierra no lo entiendan así, ese es el fin de toda ganancia espiritual y material, el fin es repartir, repartir entre los más cercanos y los lejanos, hasta donde cada uno pueda llegar.

De lo poco que hagan unos pocos, bueno o malo, depende mucho para muchos. De lo poco que yo dé de mi alegría, muchos estarán alegres, de lo poco que yo entregue de mi oración, muchos te orarán a Ti, de lo poco que yo use de bondad, muchos serán buenos, de lo poco que yo ame, muchos aprenderÁn a amar. Por eso Señor mío y Dios mío, mi alma tiembla de miedo y responsabilidad, toda yo soy menos que poco, toda yo soy nada y menos que nada. Toda yo, Señor, camina por la cuerda floja entre querer y no querer, entre amar y no amar, entre dar y no dar...


Toda yo, Amor, te pide:

Enséñame a repartir de lo que no tengo y pido que me des para darlo yo y darlo a ese mar inmenso de hermanos que hoy, cuando desaparecieron para mi las razas, los colores, las ideas, las religiones, sentí más cerca, cerca de Ti.
CREO, SEÑOR, PERO AUMENTA MI FE,
AMO, SEÑOR, PERO ENSÉÑAME A AMAR.

1 comentario:

Anónimo dijo...

amar sin condiciones, sin diferencias