Como en la lluvia se abre la flor,
así mi alma en tu Gracia, florece.
Te he buscado entre las oleadas
de trigo y amapolas grana.
Te he buscado cuando callabas
a mis oídos el amor.
Ven, Señor, .ven que la noche
me cerca, me apaga.
Necesito de nuevo la lluvia
de tu divina Gracia