AMIGOS DEL ALMA

jueves, 7 de mayo de 2009

AMOR QUE A TÍ REGRESA


Y hoy, señor, llegaste por segunda vez a mi casa, no me cogiste por sorpresa. Casi te esperaba, aunque no tenía la certeza, mi corazón andaba revoloteando entre la dicha de volver a recibirte y el miedo a que no fuera así. Y llegaste, Jesús y no venías enfadado, no traías riña alguna en tu rostro amado. Mil disculpas tenía yo preparadas, no me dejaste descargar ninguna, calla, calla háblame de amor, parece que decías... Toda yo callé y no supe que decirte... Sólo mirarte, sólo el abrazo fuerte, sólo el amor silente, sólo esta herida que llevo en el pecho clavada y Tú, nadie más que Tú conoce. Jesús, mi Jesús, la que solo tus llagas sangrantes, que mis pecados abren cada día, pueden sanarme de los absurdos dolores, de esa nada que duele como si fuera algo.

Señor, has venido, has llegado y yo te esperaba hambrienta, sedienta, necesitada... Cierra mis ojos a todo, vuelve mis oidos sordos, abre, airea esos rincones de mi alma tan cerrados, tan viciados, tan obscuros para que se llenen de luz, de tu luz, para que brille el amor, que salga a borbotones, que reparta, que dé sin temor al rechazo, que llegue a los demás y vuelva a Tí en desbordada crecida de mar inmenso que nunca se agota. Tu amor que va y viene de tu corazón al mío y en el mío no se queda porque me lo diste para repartir a todos, sin mirar ni tocar la forma en que te lo devuelvan.

Amor que es tuyo y a tí regresa.

Gracias, Señor, por venir y quedarte.

2 comentarios:

ARCENDO dijo...

Otra vez, el Señor en tu casa, otra vez el Señor dentro de tí. De dentro de tí, salen esas palabras que transmiten su sed por El. El único que puede saciarla..., Yo le pido a la Reina de Mayo, que no te falte nunca ese agua de vida, que siempre la conserves y que nos la transmitas como lo haces.., regando con tus palabras y oraciones, mi hoja, a veces tan seca. Besos, te quiero.

Militos dijo...

Gracias Arcendo porque sé que el comentario también te ha salido de dentro.
Yo también te quiero.
Un beso